El Observatorio de la Transición Energética y la Acción Climática (OTEA) de BC3 ha publicado recientemente el último informe sobre el análisis del impacto distributivo de las medidas para contener la factura energética de los hogares. Este documento proporciona información detallada sobre los costes y beneficios de las políticas energéticas que buscan reducir la factura energética.

El estudio ha evaluado los impactos de las políticas y estas han sido sus principales conclusiones:

• El aumento medio de la factura energética fue del 29% en 2022, mientras que en el caso de los hogares vulnerables y vulnerables severos fue del 16% y del 4% respectivamente.
• La progresividad del conjunto de las medidas ha sido elevada. Las medidas redujeron la factura un 4,9% respecto de su renta para el 1% más pobre y un 0,6% para el 1% más rico.
• Sin embargo, dado el carácter general de las medidas, el decil 1 obtiene de media 314€ por hogar, mientras que el decil 10 obtiene 488€.
•  El efecto progresivo de las medidas beneficia a los colectivos más afectados, como a los hogares rurales o los hogares cuya referencia principal es una mujer.

Finalmente, el informe insta a focalizar las ayudas en las rentas bajas y, en la medida de lo posible, en rentas bajas-medias y grupos más afectados, además de identificar a los hogares vulnerables al transporte y en la concesión automática de bonos sociales a los colectivos vulnerables.